Recuperados ya de nuestra visita al Parque Temático de la Minería y el Ferrocarril, más conocido como el Tren de Utrillas, hemos de decir que pudimos disfrutar de una magnífica jornada inmersos en aquello que nos gusta hacer, nuestra afición, y que además le pone una nota de color a la rutina diaria. No solo por la visita en sí, si no por el buen rato que pudimos compartir entre todos y que es nuestro deseo fomentar y mantener siempre.
Vimos el Museo de Lámparas y Utensilios, el Museo de la Ciencia y Arqueología Minera y visitamos el Aula de Paleontología, además de la "joya de la corona"; viajamos por parte del recorrido recuperado hasta el momento de lo que fue el antiguo trazado férreo del pequeño Ferrocarril Minero de Utrillas en la provincia de Teruel, tirado por una auténtica locomotora de vapor; La Hulla nº1, con su correspondiente lluvia de carbonilla.
Además fuimos en busca de los restos del complejo minero donde almacenaban y clasificaban el carbón e inmediatamente lo transbordaban al Ferrocarril Utrillas-Zaragoza, que lo transportaba hasta la capital y en cuyo lugar aún quedan las ruinas así como las dos rotondas de distinto ancho de vía que alojaban la reserva de locomotoras con sus correspondientes (y ya desaparecidas) rotondas.
De regreso hicimos escala en la estación de Caspe a fin de inmortalizar lo que queda de lo que fue aquella estación y que no conocíamos, poniendo con ello punto final a un gran día y emprendiendo el regreso al punto de partida para preparar y volver a comenzar un nuevo y apasionante viaje...
Y en el Café Bar Las Vegas nos comimos la mejor hamburguesa de Aragón (Campeonato de España de Hamburguesas).
Viaje en la locomotora Hulla nº 1.
Aula de Paleontología.
Estación de Caspe.